El Tribunal Superior de Justicia del País Vasco (TSJPV) ha ratificado sentencia del Juzgado de lo Social número 1 de Bilbao, que condenó a una empresa a indemnizar con más de 420.000 euros a un trabajador por «incumplir la prevención con el amianto» que causó el cáncer pulmonar y posterior fallecimiento de un trabajador.
Las secuelas fueron reconocidas por el Instituto Nacional de la Seguridad Social como enfermedad profesional «a causa del amianto inhalado en el trabajo, sin información del riesgo, mientras la empresa incumplía la legislación de prevención vigente».